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Cada día que pasa se hace más evidente que lo comentado en mi libro ‘La banca culpable‘ no es exagerado, sino que se queda corto.
Un  rescate financiero de más de 70.000 millones de euros que se inyectó a entidades no tan solo mal gestionadas, sino presuntamente gestionadas contra el interés público a conciencia.
Como a veces una imagen vale más que mil palabras, os dejo el enlace a mi aparición hoy en Espejo Público (minuto 01:20:55 en adelante) y en las noticias de Antena 3 (minuto 13:25).
Agradezco a Antena 3 el interés mostrado por mis opiniones como CEO de Futur Finances y directo editorial de iAhorro.com.
Os dejo la entrevista que me hicieron en el Late Night de Canal 4 este pasado jueves, en la que opino sobre la crisis económica, las tarjetas Black, mi libro ‘La banca culpable‘ y las medidas económicas de Podemos, además de mi trabajo como director editorial en iAhorro.com
Una entrevistadora habla en catalán y la otra en castellano:

Avalar es una decisión personal que implica comprometer todo tu patrimonio presente y futuro, además del de tus herederos, si falleces antes de que el aval deje de tener vigencia.

Siempre lo deberíamos limitar, por ejemplo estableciendo que se avala el 20% de la deuda hipotecaria que primero se amortice, bien con figuras como el hipotecante no deudor. Y si el aval lo solicita el banco por qué no está seguro de que los hipotecados van a poder pagar, mejor pensar si nosotros nos vamos a fiar de alguien al que el banco no le da la confianza necesaria.
De todas estas cosas he opinado hoy en un programa con un formato peculiar (ver online en este enlace), pero en el que me he sentido a gusto pudiendo dar más información al público en general sobre el aval y sus riesgos.
Ser trabajador por cuenta propia en España es un acto de fe y valentía, asumiendo los riesgos de un negocio (muchas veces básicamente para conseguir un empleo) y prácticamente ningún derecho laboral.
La economía se está precarizando, con empleos de baja remuneración, temporales, a tiempo parcial y, todo ello, teniendo en cuenta que el mal empresario lo utiliza muchas veces de forma ilegal, haciendo contratos a tiempo parcial que no lo son y pagando (o no pagando) las horas en B.
La alternativa es ser un autónomo, en una situación aún más precaria si cabe. En un país que tiene un número insuficiente de empresas competitivas y con futuro que creen el empleo suficiente para dar trabajo a la mano de obra desocupada, o nos sometemos a las leyes económicas del mercado de oferta y demanda laboral, con las consecuencias ya citadas, o bien asumimos que el mejor empleo es el que creamos nosotros.
Prefiero una economía autonomizada a una precarizada. Si queremos sentar las bases de un mercado laboral mucho más competitivo, pero justo, tendríamos que mejorar de forma muy importante la cobertura y derechos de los trabajadores autónomos.
Les guste o no a los trabajadores, los falsos autónomos son una realidad y seguirá creciendo. Luchemos contra esta realidad, pero legislemos para que el colectivo tenga más derechos, al menos.
En RT me han entrevistado esta semana a raíz del aumento de la brecha que separa ricos y pobres en EE.UU.
Primero dejar claro que los mercados financieros determinan las políticas de los países soberanos por muchas razones, algunas naturales a la dinámica de un mercado libre y otras a intereses inconfesables de determinados centros de poder. Evidentemente, esta segunda razón, esta mano negra, queda fuera de la opinión pública, en muchas ocasiones.
Que nuestros acreedores influyan de forma transparente en las decisiones de nuestros políticos, nos puede gustar o no, pero no se aleja del saber popular «quién paga, manda». Para evitar que los prestamistas de países soberanos manden, hay que ser autosuficiente en materia financiera. Es decir, ingresas igual o más recursos que los que gastamos.
Por otra parte está la desigualdad en la distribución de la riqueza. Si los ricos de dentro del país son unos avariciosos e ignorantes del verdadero sentido de la vida, que es ayudar, tienen a influenciar a los gobernantes para que el sistema fiscal sea mucho más benévolo con ellos. Al final son las clases medias las que pagan la mayoría de impuestos. Y si cada vez hay más riqueza en manos de pocos, cada vez hay menos ingresos tributarios. Eso conlleva menos Estado del Bienestar para las clases menos pudientes y, a la postre, más desequilibrios y peor economía.
Como dije en un trozo de la entrevista, no creo que el término ‘rico’ deba usarse como peyorativo. En este colectivo hay gente buena, gente que se ha hecho rica arriesgando. Son las malas personas, los aprovechados, los derrochadores, los ignorantes y los malvados ricos, los que hay que atacar y limitar. Los malos ricos, hacen malos países. Y al final, por si alguno me está leyendo, su destino es el mismo que el de los mortales menos afortunados en materia de dinero. Con una salvedad; su vida tendrá muy poco amor desinteresado y, al final, poco importará su dinero. Morir sin gente que te ama a tu alrededor, es haber sido un inútil vital. Prefiero dejar este mundo rodeado de gente que me quiere al lado, como le pasó a mi gran padre Antoni Monserrat Moll, que rodeado de dinero estéril e inútil para con la trascendencia.
Sí, ha leído bien. El rescate a nuestra banca ha sido un éxito.
Solo un «pequeño» matiz, un éxito para los bancos españoles (o mejor dicho, para sus gestores, políticos, sindicatos y patronales que estaban en las Cajas de Ahorro cobrando para nada), no para la economía real en su conjunto ni, mucho menos, para el contribuyente, usuario de servicios públicos esenciales o preferentistas y demás clientes bancarios de este tipo.
Afirman que sin el rescate entidades financieras sistémicas habrían cerrado y el coste habría sido mucho mayor. Solo hay una pega, no tenemos un estudio que lo evidencie. Se ha hecho un traje a medida del sector financiero, sin que el votante haya tenido ni voz ni voto. Se ha menospreciado al que debería mandar, ya que al final es el que paga: el contribuyente.
¿Qué podemos hacer? Cada uno lo que buenamente quiera. Personalmente, mi arma es mi voto.
Os dejo una interesante noticia sobre este mismo tema, artículo de RT titulado «Experto: La economía real de España «está peor» después del rescate de la Troika«. El «experto» se supone que soy yo, así que vamos bien.

La moneda digital Bitcoin es una realidad matemática y digital, es decir, una convención social sustentada por tecnologías de la información.
¿No entiendes esta definición algo etérea? No inviertas en Bitcoins. Hay que estudiar primero el activo con mucho detenimiento, antes de invertir, especular o simplemente gasta recursos.
El dinero tradicional, los euros de tu cartera, son convenciones sociales, además controladas por un Banco Central que no genera dinero respaldado por nada, solo por la convicción de todos los ciudadanos que eso es un medio de pago que intercambia bienes y servicios.
Dinero de curso legal, euros o dólares, no tienen valor más allá de la fuerza del país que los emite. Bitcoin  tendrá valor si las personas que lo usan se lo dan; más poder que cualquier divisa, si fuera utilizado y aceptado por la suficiente masa crítica de personas.

Los amigos de RT han recabado mi opinión sobre el uso de la moneda privada en países como Argentina. Algunas de las declaraciones que han recogido son:

En general, los economistas opinan que bitcóin puede ayudar a los ciudadanos de América Latina a protegerse de la hiperinflación en sus países, pero advierte que EE.UU. busca controlar las transacciones con esta moneda virtual.


«Le interesa a EE.UU. poder controlar si no la moneda, porque no la puede controlar, al menos las transacciones. Y para poder controlar mejor de alguna manera las transacciones que se hacen con bitcóin es útil darle una cierta legalidad. El de Latinoamérica es el caso típico de Estados que no controlan la oferta monetaria, no controlan su divisa de forma adecuada y generan muchísima inflación», dijo a RT el economista Pau Monserrat Valentí. 


«Los ciudadanos de estos Estados si pueden operar con bitcoines se pueden proteger de esa hiperinflación que generan los Estados latinoamericanos, y por tanto en este tipo de países es muy probable que el bitcóin acabe imponiéndose», agregó.

Los Bitcoin, de momento, no los controla ningún Estado. Lo intentarán y, tal vez, lograrán. Pero mientras se pueda crear una moneda digital y ser aceptada por personas, habrá alternativas a la ansia de control de los poderosos.
Ha sonado a V de Vendetta, será por la hora que es. Os dejo una noticia de RT sobre el tema, en la que opino a partir del minuto 4:30:


Y un trozo de la película que he citado antes:

Hay voces que apuntan al fin próximo de la crisis económica en España. Otros economistas, por ejemplo Roberto Centeno, son bastante más pesimistas.
En lo que no parece haber tantas discrepancias es en el crecimiento sólido del empleo en el país, que se posterga para el 2016 y más allá. Con esta previsión, a mi que nadie me diga que estamos saliendo de la crisis ni que falta poco. En todo caso, algunos pocos salen de la crisis. Tu y yo, probablemente estemos luchando para vivir en crisis, que no es poco.
Os aseguro que no soy pesimista, luchando se vence en cualquier contienda por pantanoso que sea el campo de batalla. Pero nos queda mucha lucha cuerpo a cuerpo, desde mi punto de vista. Espero equivocarme, pero la paz está aún lejos de firmarse, en materia de empleo remunerado y digno.
En todo caso, os invito a escuchar la tertulia de economía de IB3 siguiente y la confrontación de ideas con el profesor de economía Antonio Alcover, más optimista que un servidor. Gran parte de la tertulia es en castellano y parte en catalán:

Por otra parte, os dejo una entrevista en Canal 4 TV, en catalán, hablando de los presupuestos para el 2014 de la comunidad de las Illes Balears, en que se toca también el tema del crecimiento esperado para este año en esta CC.AA:

Acabo de encontrar algunos fragmentos de mi primera aparición en el magnífico programa Salvados.

Lo que se dice en la entrevista con Jordi Évole no descubre nada a los que ya conocíamos el mundillo bancario. Por desgracia, el gran público no era consciente de esta nefasta realidad comercial imperante en la mayoría de sucursales de los bancos en España.
Y de estas malas prácticas bancarias, hemos acabado con deshaucios dramáticos y sin sentido social ni económico o ahorros diezmados por las participaciones preferentes. Y en lugar de salvar a los clientes engañados o mal informados, se salva a los bancos. Bancos Salvados, lo que hay que ver.
Para ascender hay que vender. No ser un buen asesor (lo cual no significa que algunos buenos asesores también sepan vender y asciendan de forma adecuada):


Y el cierre del Banco Salvados, que pese a que publicita que «no le vamos a hacer perder dinero», no lo mantiene. ¿No os suena a las comisiones que se están inventando los bancos en la actualidad?


Nuestros políticos son una caja de sorpresas en cuanto a declaraciones absurdas, erróneas, mal intencionadas, tendenciosas o, simplemente, huecas.
Nuestro presidente Mariano Rajoy nos deleita con la última de las ocurrencias informativas en materia económica, en The Wall Street Journal, comentando que «Spain is out of recession but not out of the crisis«. Y se queda tan pancho.
Se han puesto todos de acuerdo para inyectar optimismo a la ciudadanía, desde la CEOE al BBVA. El problema es que si el optimismo es falso, crea un efecto rebote mucho peor.
Saldremos de la crisis, sí. Pero nadie sabe cuándo. Y faltan muchas medidas en la buena dirección, sobrando las palabras vacías.
Os invito a ver esta noticia en RT, canal de TV online que ha recogido algunas de mis opiniones sobre el tema: